Aquí te dejo algunos tips suaves y realistas para atravesar esos días con un poco más de compasión:
1. Haz lo mínimo necesario… y si puedes, menos
No tienes que ser productivo/a cada día. Si hoy solo puedes hacer lo básico —como comer algo, asearte o responder un par de mensajes— eso también cuenta. A veces, sobrevivir el día ya es suficiente.
2. Habla contigo con cariño
Evita juzgarte por cómo te sientes. Decirte «no debería estar así» solo aumenta el malestar. En cambio, intenta algo como: “Hoy me siento bajoneado/a, y está bien sentirme así. Mañana será otro día.”
3. Busca pequeñas cosas que te reconecten
Una canción suave. Una ducha caliente. Un abrazo (aunque sea uno propio). Salir a ver el cielo. No necesitas una gran solución, a veces solo basta una chispa para sentirte un poco mejor.
4. Evita decisiones grandes hoy
Cuando no estás bien, tu mente tiende a ver todo más oscuro de lo que es. No es el mejor día para decisiones importantes. Si puedes, pospónlas. Todo se ve distinto con descanso y claridad.
5. Exprésate sin filtro
Escribe lo que sientes, graba un audio para ti, dibuja algo o simplemente llora. Liberar emociones es parte del proceso. No tienes que tener respuestas, solo permitirte sentir.
6. Recuerda: esto también pasará
Puede que hoy no sea tu mejor día, pero no significa que será así siempre. Tus emociones no son permanentes. Así como las olas vienen y van, también lo hacen los días nublados.
🌈 Sé amable contigo hoy
No estás solo/a. Todos tenemos días así. Cuídalo con la misma ternura con la que tratarías a un ser querido que no se siente bien. A veces, el primer paso para sentirte un poco mejor… es dejar de exigirte sentirte bien.